Nueve directoras para (re)descubrir -

Películas fuera de foco que están esperando que las descubras.

Chantal Akerman
La prolífica directora belga tiene una filmografía extensa y, por lo tanto, difícil de abarcar en su totalidad. Falleció a los 65 años (2015) pero comenzó a filmar desde muy joven y, a lo largo de más de cuarenta películas, se convirtió en una de las directoras más importantes de la historia del cine. La representación de la mujer en las intimidades cotidianas es el tema que parece unir toda su filmografía y por eso se la considera una de las pioneras cineastas feministas. Lo cotidiano y lo autorreferencial predominan en su enorme obra.

Dónde ver. En la plataforma mubi hay un pequeño puñado de sus películas y entre ellas te recomiendo Letters Home, una manera interesante y teatral de narrar la correspondencia entre Sylvia Plath y su madre, y No Home Movie, su última película en la cual filma a su propia madre, sobreviviente al Holocausto.

Narcisa Hirsch
La directora experimental más importante del cine argentino nació en Berlín pero antes de la segunda guerra mundial se radicó en nuestro país. A lo largo de su carrera ha filmado más de treinta películas que se caracterizan, en pocos minutos, por explorar y explotar lo sensorial. Invitan a los sentidos y se alejan de las formas convencionales de narración para apostar por lo poético de las imágenes antes que en una historia, y en las cuales se puede apreciar su
experiencia en artes visuales como la pintura y el dibujo. Temas como el amor, la muerte, el erotismo son vistos con fuerte hincapié desde lo íntimo, el cuerpo, el detalle. Algunos trabajos a destacar: Reflejos, Marabunta, El Aleph (basado en el cuento de Borges).

Dónde ver. En www.narcisahirsch.com.ar está disponible un PDF con unos links de películas subidas a Vimeo. Pero además, para conocerla te recomiendo dos documentales: Narcisa, de Daniela Muttis que se puede ver a través de puentesdecine.com.ar, y Reflejo Narcisa, Silvia Szperling que se encuentra en Cine Ar Play.

Lizzie Borden
Linda Elizabeth Borden decide de niña adoptar el nombre de la famosa “asesina del hacha” que mató a su familia. Su costado rebelde se continuaría explorando más adelante a lo largo de películas provocadoras del cine queer y feminista como Born in flames y Working girls, películas independientes y marginales. En la primera, película de culto que es una especie de grito, mujeres de todo tipo de edades, clases, razas y sexualidades deciden unirse y alzar la voz. Aunque la película tenga casi cuarenta años se retratan situaciones que todavía se pueden ver en la actualidad. En Working Girls la directora neoyorquina relata un día en la vida de unas prostitutas en el departamento que funciona como prostíbulo. La cotidianeidad de estas mujeres está plasmada con mucha naturalidad y se convierte en un retrato de la dinámica laboral en un ambiente como podrían ser tantos otros.

Dónde ver. En la plataforma mubi se puede ver Born in flames. Working girls recientemente fue editada en EE.UU. por Criterion (la distribuidora de películas impecable curaduría y contenido).

Amy Seimetz
Después de varios años actuando y experimentando con algunos cortometrajes, realizó su ópera prima Sun don’t shine. Con pocos elementos, pocos actores, y un guión que iba revelando lo que sucedía de a poco, la película protagonizada por la que sería su actriz fetiche, Kate Lyn Sheil, ponía en foco una historia de amor que desde el principio se percibe tóxica, aunque a una le tome tiempo entender exactamente qué son, qué hicieron y a dónde se
dirigen. En su última película, She died tomorrow, consigue plasmar la ansiedad y el miedo a morir y se estrenó justo en los primeros meses de pandemia, lo que intensificó el efecto. Pero además del cine, y de una larga carrera como actriz, Seimetz también ha estado detrás de cámara en series televisivas. Fue quien estuvo a cargo de llevar a la televisión la historia que surgió en una película menos conocida de Steven Soderberg. The girlfriend experience, la película, mostraba la vida de una escort de lujo interpretada por Sasha Grey. No era la historia de una prostituta, sino de una mujer que, como trabajo, genera vínculos que incluyen la intimidad sexual pero también otro tipo de compañía, casi como si fuera una novia, de ahí el título. En la serie la historia cambió un poco y en su primera y mejor temporada sigue a Christine, una estudiante universitaria que decide hacer ingresos extras como su amiga escort. Protagonizada esta vez por Riley Keough, la primera temporada sigue el crecimiento de este personaje de manera notable, a veces con distanciamiento y de manera un poco fría, y otras visceral. Lamentablemente, la segunda temporada, de la cual también Seimetz estuvo a cargo, no tuvo el mismo éxito: se enfocó en dos historias distintas y paralelas que poco consiguieron llamar la atención. Para la tercera temporada, la serie cambió de mando.

Dónde ver. En la plataforma mubi se puede acceder a Sun don’t shine y a través de Starzplay a las temporadas de The Girlfriend Experience.

Anja Marquardt
Si hablamos de The Girlfriend Experience podemos mencionar a la directora alemana que se encargó de la tercera temporada, la que se está emitiendo actualmente. Una sola película le sirvió para demostrar que era la adecuada para hacerse cargo: She’s lost control. Al verla una puede entender por qué. Allí, la protagonista Ronah es una psicoterapeuta que ayuda a sus clientes a estar cómodos y confiados en la intimidad sexual. Ronah se acerca a sus clientes, los escucha, los entiende, los transforma. Aunque el trabajo incluye sexo, éste suele ser un paso más de un largo camino. Y Ronah de repente se ve enfrentada a un caso demasiado complicado y al mismo tiempo muy intrigante. Marquardt rueda su película en Nueva York, con una mayoría de planos abiertos y estáticos. Para la tercera temporada de The Girlfriend Experience esto se lleva un paso adelante. La historia gira en torno a otra joven (cada temporada es independiente y eso le permitió crearla de cero), interpretada esta vez de manera excluyente por la prometedora Julia Goldani Tellers (The Affair), una neurocientífica a quien el trabajo como escort le permite empezar a descifrar mejor los comportamientos y a las personas. Los capítulos, siempre breves, permiten entrar de manera paulatina en la vida de esta mujer que parece llevar dos vidas diferentes pero en realidad están íntimamente conectadas y además jugar con la inclusión de la inteligencia artificial.

Dónde ver. En la plataforma mubi se puede ver She’s lost control y la serie, como mencioné, a través de Starzplay.
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Eliza Hittman
El año pasado hubo una pequeña película que dio que hablar, al menos entre quienes la vieron. Never Rarely Sometimes Always narraba la historia de una adolescente que, a escondidas, viaja con su amiga desde Filadelfia a Nueva York para realizarse un aborto. Podemos pensar que si la película no hubiese elegido una temática que, más allá de la ley, sigue siendo tabú en muchos lugares. Durante la época de votación de los Premios Oscar se viralizó un mail que uno de los miembros de la academia le mandó a la directora en el cual expresaba que esta persona ni siquiera vería su película para considerarla. Más allá de la poco feliz anécdota, lo cierto es que la película expone otras problemáticas y lo hace desde la mirada de esta adolescente que de repente se da cuenta que hay más aparte del embarazo no deseado, algo que no veía, y sobre todo es una historia de amistad entre mujeres. Distinta a su primera película, It felt like love, donde una adolescente sufre su despertar sexual en medio de un caluroso verano y prácticamente sola: admirando a la chica que lleva una vida promiscua que envidia y frustrándose por no conseguir ser como ella. A la larga, dos películas intimistas y muy duras sobre ser una chica adolescente.

Dónde ver. En mubi se puede acceder a su ópera prima It Felt Like Love como Never Rarely Sometimes Always en HBO Max.
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Paula Hernández
Después de algunos cortos y publicidades, Paula Hernández dirige en el 2002 su ópera prima Herencia. Allí se empieza a evidenciar el interés por sus personajes. Lluvia y Un Amor son dos historias de encuentros y reencuentros. La primera empieza al estilo La autopista del Sur de Cortázar y reúne a una mujer que no sabe a dónde va junto a un hombre que no sabe de dónde viene. En Un Amor, adaptación del que quizás sea el mejor cuento de Sergio Bizzio, plasma un triángulo entre tres amigos de la infancia y la adultez que vuelve a reunirlos y a despertar ecos del pasado. No obstante, más allá de haber recibido algunos reconocimientos con sus films anteriores, es Los sonámbulos, un drama familiar y tenso que bebe de La ciénaga de Lucrecia Martel, la película que termina de consolidarla, al punto de haber sido elegida para representar al país en los Premios Oscars el año pasado (sin haber quedado elegida). Su última película, vista en el último Festival de Cine de Mar del Plata y con un paso breve y esporádico por algunas salas de cine, es Las siamesas, otro tenso drama pero esta vez de dos personajes: madre e hija en medio de un viaje en micro hacia un pueblo de la costa. Basada en un cuento de Guillermo Saccomanno, presenta en medio de un in crescendo que se va tornando más y más claustrofóbico una relación tan problemática como necesaria.

Dónde ver. Los Sonámbulos se encuentra en Amazon Prime y en CineAr Play hay un foco dedicado a ella con sus otras películas y en Estrenos, Las Siamesas.
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Andrea Testa
En el 2016, después de dirigir algunos cortos y el documental Pibe Chorro, sobre la problemática de los menores de edad delincuentes, Testa dirigió junto a Francisco Márquez La larga noche de Francisco Sanctis, la adaptación de la novela de Humberto Costantini. La historia era sobre un hombre que durante la Dictadura intenta mantenerse al costado de la política hasta que recibe la visita de una vieja conocida y le brinda información que lo hace cuestionarse su posición de no hacer nada. Este logrado drama sobre esa decisiva noche y protagonizado por Diego Velázquez ganó en el BAFICI y tuvo su proyección en Cannes. Después de esta atención, Testa volvió al documental con temas urgentes: Niña Mamá es un documental que sobre todo escucha las historias de adolescentes embarazadas. Con cámara fija y en blanco y negro, la película va presentando diferentes historias que evidencian la necesidad de Educación Sexual Integrada y del Aborto Legal, Seguro y Gratuito.

Dónde ver. Sus tres películas se encuentran disponibles en la videoteca del Colectivo de Cineastas.

Tamae Garateguy
Si hay una directora atrevida y cuya filmografía demuestra un interés por explorar y homenajear el cine de género, ésa es Tamae Garateguy. Películas que pueden desbordar de terror, erotismo, muerte. Como Mujer Lobo, que es la historia en blanco y negro de una mujer seductora que se desdobla y caza hombres en los andenes de la Línea B. O el thriller erótico Hasta que me desates, que une a dos personas que sólo pueden entenderse entre ellos. O su última película estrenada (a través de CineAr en contexto de pandemia), Las furias, sobre un pareja cuyas familias se ven enfrentadas como en un western en medio del desierto, entre un chico de una comunidad originaria y la hija de un terrateniente blanco. O su próxima película, vista por ahora sólo en el último Festival de Cine de Mar del Plata, un clásico policial con Guillermo Pfening como un torturado policía. Pero la prolífica directora también ha sido parte de las películas UPA y hasta dirigió el documental 50 Chuseok, que sigue al actor Chang Sung Kim en medio de un viaje a sus raíces. Sin embargo es en el género donde se destaca y conviene siempre seguirla en lo que hace.