La celebración: Fellini en el museo de arte decorativo

Con motivo de los cien años del natalicio de uno de los directores más importantes e influyentes de la historia, se inaugura en nuestro país una exhibición dedicada a su obra. Hasta el 5 de mayo en el Museo Nacional de Arte Decorativo.


En Argentina el cine volvió a estar en foco. Inicialmente porque después de un año han vuelto a abrir salas y la apertura se encuentra en crecimiento. Además porque se conmemora –con un año de demora, justamente a causa de la pandemia- el centenario del natalicio de uno de los grandes maestros del cine: Federico Fellini. De hecho, una de las últimas películas que se han proyectado en los cines argentinos antes del cierre, fue la versión remasterizada de La Dolce Vita; el ciclo se cumple con la apertura que trae el reestreno de su obra maestra. 8 ½ ya está en las salas en su versión restaurada. Y finalmente el museo nacional de arte decorativo abre la muestra que llega desde Europa: es una excusa para celebrar e introducirse en su mundo cinematográfico.

El 20 de enero de 1920 nació en Italia quien es quizás el director de cine más importante de la postguerra. Sus primeras grandes aficiones, antes de descubrir su pasión por el cine, fueron el dibujo y la caricatura. En 1940 empezó a escribir guiones y en 1944 conoció a Roberto Rossellini, con quien luego colaboró en el guión de la icónica película neorrealista Roma, ciudad abierta. Su primera película como director la realizó en 1950, una codirección junto a Alberto Lattuada: Luci del varietà. Pero al año siguiente se lanza solo a dirigir Lo sceicco bianco y, a partir de ahí, su filmografía no dejará de crecer y madurar hasta adoptar un estilo propio y único. Ganó cuatro premios Oscars a mejor película extranjera (por La Strada, Las noches de Cabiria, 8 ½ y Amarcord) y un quinto honorífico por su trayectoria que pudo recibir meses antes de su fallecimiento. “En la mitología del cine, el Oscar es el premio supremo”, dijo alguna vez sobre esa ceremonia que a lo largo de los años fue perdiendo magia.

Y además de acuñarse gracias a su cine el término “fellinesco” a esas escenas de fantasía y ensueño, es el responsable de darle nombre al oficio de papparazzi (por un personaje de su película La Dolce Vita). Fallecido el 31 de octubre de 1993, no sólo es una influencia fundamental para quien se dedica al cine sino que éste no pierde vigencia y sus películas se siguen descubriendo y redescubriendo, y estudiando y analizando.

“Al final de las tomas decía Stop!, como todos los directores del mundo, pero, a diferencia de muchos otros, él aquel día se llevaría a su casa una escena perfecta”. Así describe Dario Argento en su autobiografía la impresión que le causó en sus comienzos presenciar una parte del rodaje de la película Giulietta degli spiriti, la primera que hizo a color y última colaboración junto a su mujer y musa Giulietta Masina. Esa extraña película onírica y divertida pero también algo agridulce que se puede ver, junto a algunas otras del realizador, a través de la plataforma argentina Qubit.

¡Qué mejor que una muestra que recopila fotos inéditas, dibujos personales, procesos creativos, vestuario original, diseño escenográfico, guiones y partituras, junto a testimonios y anécdotas para acompañar su cine y celebrar por fin sus cien años! Sumergirse de manera más profunda en lo maravilloso de ese mundo que siempre apostó por los sueños de la mano del hombre que hizo de su propia vida una obra de arte.

Además habrá una serie de conferencias y debates que se harán también a través de las diferentes plataformas digitales para abordar así las diferentes facetas del director, su legado y su influencia en la cultura local.

El centenario Fellini en el mundo
Museo nacional de arte decorativo (Av. del Libertador 1902 – CABA)
Salas: piso principal y salas de exposiciones temporarias.
Jueves a domingo de 13 a 19h. Entrada libre y gratuita. Con reserva previa.